El tema del despertar de hoy fue “People are strange”. No sé si lo conté acá pero algunas veces me despierto con una canción en el cerebro. A veces es algo que estuve escuchando, pero muchas otras veces se siente azaroso e inesperado. Desde hace un tiempo, cuando puedo, las agrego a una lista que hice para eso.
Algunos de esos temas son:
"Águas de março" (este sonó muchas mañanas repartidas por ahí, es el primero de la lista).
¿Saben qué? Mejor copio capturas:
Este blog ya no es para interacción; de hecho, está en “privado” (quizás lo ponga público de nuevo... veo). Supongo que es para tener un registro o, bueno, es un espacio mío. A veces no lo ocupo, y últimamente pensé que quizás tengo que aceptar que ya no voy a escribir más y eso está perfecto. Claro que ahora estoy escribiendo.
Me parece muy copado eso que me pasa de despertar con música en el cerebro y quise dejarlo acá. Me intriga saber si le pasa a mucha gente más. Hace un par de años lo conté en una reunión familiar y me enteré de que a mi hermana Ana y a mi papá también les pasa. Lo hablábamos como lo más normal del mundo (fue la vez de "Águas de março", creo, y ahí decidí hacer la lista).
Antes, lo primero que hacía al levantarme era poner música y hacer unos mates. Bueno, casi siempre que podía ponía música. Cuando vivía sola y cuando vivía con bebés/niñitos. A veces, también, tomando mates en la cama con mi pareja —momentos que disfrutaba mucho. Después eso fue mermando (escuchar música), creo que por cuestiones de convivencia*. Eso habla de los pocos momentos de soledad tranquila que tengo. O tranquilidad estando sola. Estoy recuperando de a poco lo de poner música cuando me levanto, si puedo. A veces sola, o mientras los demás duermen o hacen fiaca, y a veces cuando me levanto junto a Amelia y pongo temas que nos gustan y nos apropiamos: “Azúcar del estero”, “Que ves el cielo”, “Doscientos años” y “Canción de amor”. Varias versiones y en repeat (hice una lista, obvio).
Tampoco sé si conté acá que saqué el registro. Creo que tuve el auto uno o dos años hasta ir a rendir el examen. Fue muuuy baby steps (referencia a ¿Qué tal, Bob?) o cabra de capricornio, pero lo logré (y tuve suerte: cuando fui a rendir no me tomaron el tema de estacionar y eso porque llovía. jajajaja). Desde hace 7 meses o más que estoy en proceso de separación, y creo que también es baby steps como suele ser mi estilo, aunque no deja de ser muy intenso (también mi estilo, a lo profundo). Mi salud anda a los ponchazos como nunca; como le decía a una amiga el otro día, ¡estos meses me agarraron cosas de todos los rubros! (son muchos años de trabajar en una revista de clasificados). Estuve mal de la vista (por distintas razones), del intestino, de un músculo abdominal que me distendí, de los oídos, del estómago, un poco de la vesícula y el hígado, del músculo del brazo, de la anemia, muchos virus que pasaron, de las muelas, etc. etc. etc.
Estoy como en puerperio, cuando sentís/pensás/te pasa que la vida medio que “terminó” y no te imaginás volviéndote a poner un jean. Rota. Pero ¿sabés qué? Después sí te ponés un jean o conocés gente que te encanta o salís de paseo feliz. Yo todavía en “el pozo”.
¡Ay! Como hablé de esas dos cosas fui a ver a la lista qué temas tenía en mi mente al despertar durante estos meses y el mismo día que me separé, el “domingo negro”, había puesto "Bloody mother fucker asshole". Faaa jjajajaja. Qué loco.
“I will not pretend
I will not put on a smile
I will not say I'm all right for you
When all I wanted was to be good
To do everything in truth
To do everything in truth”
O sea… 10 días después me sonaba "Aserejé", así que es re random, también (¿o no?).
Después sigo. Me tengo que ir. Estoy contenta por haber vuelto.














No hay comentarios.:
Publicar un comentario