domingo, 16 de noviembre de 2008

Avioletándonos

No es en las fiestas. No es en mi cumpleaños ni en cualquier otro tipo de aniversario. Me doy cuenta de que pasó un año más cuando los jacarandás me saludan violetas por las calles porteñas.

No sé cómo voy a hacer en El Bolsón. ¿Allá no pasará el tiempo?
Claro que allá están las cerezas, o las lengas que se colorean desplegando sobre la montaña un permanente rubor otoñal, o los amancays, o el arbusto chin-chin que inunda sus alrededores con aroma a chocolate.

Ya les contaré. Por ahora, disfruto de los jacarandás. Tal vez sea la última vez; no creo, pero quién sabe.

2 comentarios:

  1. mmmh, cerezas, lengas, chin chin, chocolate.

    No creo que extrañes a los jacarandás.

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  2. No sé, son muy especiales!!!

    Pero es cierto, es muy lindo todo allá.

    Beso!

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